"Celebramos hoy el nuevo aniversario de la Biblioteca Popular de Gral. San Martín, institución que nos vio crecer y que nos brinda apoyo continúo en nuestra tarea. Y felicitamos al Sr. Mario Bernabé, presidente de la Comisión Directiva, a quien instamos a proseguir con tan magnífica labor cultural.
Estamos reunidos hoy para debatir bajo el lema “Conociendo la historia par construir el futuro”. Y para introducirnos en ese tema, inexorablemente debemos analizar la relación que hay entre participación política y el rol de la juventud en la actualidad.
Estudios recientes sobre el tema reflejan que más del 70% de los jóvenes argentinos no tiene ningún interés por la política. ¿Cuáles son las causas de este fenómeno?
En primer lugar, esta actitud es el reflejo de las sucesivas crisis políticas y económicas que hemos atravesado. La política se transformó en una mala palabra. Tanto es así, que muchos de los encuestados se autodefinen como "apolíticos", con la intención de aparecer "incontaminados" de ese mal que es la política. Esta actitud no nos parece saludable: darle la espalda a la política es consecuencia del devenir histórico del país.
Por otro lado, la condición de joven, el hecho de pertenecer a la juventud genera actualmente reparos para el resto de la sociedad. Para algunos, los jóvenes, como principales exponentes de la sociedad de consumo, hemos sido educados en un modelo cultural en el que priman pautas individualistas con ausencia de preocupación social, ideales altruistas, valores solidarios y voluntad de cambio.
Y, además, porque nos diferenciamos de los jóvenes de ayer en el sentido de que crecimos a la sazón del desarrollo de la tecnología. Porque, por ejemplo, muchos chicos hoy, ya no recurren a las bibliotecas en busca de libros como material de consulta. Las bibliotecas deben aceptan ese desafío modernizándose, creciendo, incorporando nuevas herramientas, entrando en la era digital que tan en boga está en la actualidad. Lo que no quiere decir que el libro ya no tenga razón de ser. La educación está unida a todos los cambios sociales que impulsa la tecnología.
Los jóvenes vamos redefiniendo las formas de comunicación. Algunos autores ya hablan de que quien no se adapta al cada vez más cambiante escenario digital, se encuentra fuera del mundo. La tecnología reestructura el saber como lo conocíamos: los jóvenes podemos enseñarle a los mayores y el más erudito de los intelectuales puede ser un tecno analfabeto.
Y, además, porque nos diferenciamos de los jóvenes de ayer en el sentido de que crecimos a la sazón del desarrollo de la tecnología. Porque, por ejemplo, muchos chicos hoy, ya no recurren a las bibliotecas en busca de libros como material de consulta. Las bibliotecas deben aceptan ese desafío modernizándose, creciendo, incorporando nuevas herramientas, entrando en la era digital que tan en boga está en la actualidad. Lo que no quiere decir que el libro ya no tenga razón de ser. La educación está unida a todos los cambios sociales que impulsa la tecnología.
Los jóvenes vamos redefiniendo las formas de comunicación. Algunos autores ya hablan de que quien no se adapta al cada vez más cambiante escenario digital, se encuentra fuera del mundo. La tecnología reestructura el saber como lo conocíamos: los jóvenes podemos enseñarle a los mayores y el más erudito de los intelectuales puede ser un tecno analfabeto.
La política es una práctica social y cultural imprescindible. En democracia, "política" significa presencia del pueblo en las decisiones sobre su presente, su destino y la interpretación correcta de su pasado. Porque la historia es la que hace crecer a un pueblo y la democracia se sustenta en la participación ciudadana.
Las sociedades necesitan hombres y mujeres que perciban la realidad de lo social y que se dediquen a trabajar en eso como actividad principal. Se necesitan políticos profesionales que profesen la política. Y, más que nada, profesionales que hagan de la política un ejercicio de fe y un ejercicio efectivo por el bien común. Personas que, dotados de las herramientas necesarias, puedan canalizar las demandas de la comunidad y plasmarlas en mecanismos de participación popular como un plan estratégico o un presupuesto participativo, que contribuyen a solidificar esos lazos democráticos.
Por otro lado, el interés por la política presupone un afán por cambiar la sociedad en la que vivimos e ideales que motoricen ese cambio. Como Arturo Jauretche sostenía, "los procesos de cambio siempre han sido realizados por la juventud". Como ese grupo de jóvenes que, en los albores de una guerra mundial, apostó por el desarrollo cultural de su pueblo y, desde hace 94 años, viene sosteniendo esta biblioteca popular que ha sido inexorable punto de referencia de muchos de los que estamos aquí presentes. Un emprendimiento que comenzó con la piedra fundacional del compromiso.
Por eso, en medio de esta mala fama de lo político, y el desprestigio de la juventud, muchos jóvenes hemos decidido comprometernos para que la palabra "política" recupere su significado como herramienta para promover el bienestar general y la conciencia ética.
Y ese el objetivo de la Juventud Universitaria Independiente. Un grupo de jóvenes del partido de San Martín que viene trabajando desde hace 3 años con ese horizonte. Concebimos a la política destinada al bien común y no al de unos pocos. Queremos que la política no sea sinónimo de corrupción, clientelismo y falsas promesas. Estamos convencidos que el ejercicio de la ciudadanía no empieza ni termina el día de una elección. Entendemos que la solución a nuestros problemas puede llegar como resultado del diálogo entre personas que piensan distinto. Y, fundamentalmente, sostenemos que para cambiar la realidad hay que involucrarse.
En una primera etapa nos propusimos conocer el distrito y a sus principales referentes políticos, económicos y sociales. Compusimos y difundimos en todas las escuelas y bibliotecas una síntesis investigativa con datos y análisis del partido. Y realizamos mensualmente una serie de encuentros en los que panelistas invitados venían a debatir sobre alguna problemática específica, sentando un precedente en la política local.
En esta segunda etapa de trabajo, nos propusimos conocer a las distintas comunidades. Desde el Consejo Escolar, con el trabajo de la consejera María Fernanda Álvarez, estamos colaborando con la comunidad educativa. En los últimos meses estuvimos trabajando con el sector de la tercera edad. Un diálogo constructivo que derivó en la elaboración y presentación de un proyecto de nuestra autoría tendiente a crear el Consejo Municipal de la Tercera Edad.
Y este proyecto se sustenta por el aporte de nuestros jóvenes sanmartinenses. Jóvenes con ideales, con expectativas, con ganas de poner lo mejor de sí.
Esa es la clave para construir ese futuro: no se trata simplemente de un recambio generacional; sino de un enriquecimiento mutuo, chicos y adultos, jóvenes y mayores. Los unos transmiten sus conocimientos y los otros aprenden de ellos, intercambiando ideas y, principalmente, valores.
Desde diversos espacios, los jóvenes políticos soñamos con rescatar la política a través de los valores que nos enseñan quienes nos precedieron en esta gesta. Queremos ser parte de este proceso de desarrollo y consolidación democrática, sumando creatividad y capacidad transformadora a la experiencia de quienes nos preceden en esta tarea de fortalecimiento institucional.
Se habla de la "nueva política", en contraposición a la "vieja política". Para nosotros, hablar de nueva política no es reinventar ningún término ni fijar nuevos paradigmas sino, simplemente, recuperar "la política" en su sentido más clásico y ubicarla en el centro de la escena como lo que siempre fue y deberá ser: la actividad pública más importante que nos ocupa como nación, como provincia y como municipio.
Y ese el objetivo de la Juventud Universitaria Independiente. Un grupo de jóvenes del partido de San Martín que viene trabajando desde hace 3 años con ese horizonte. Concebimos a la política destinada al bien común y no al de unos pocos. Queremos que la política no sea sinónimo de corrupción, clientelismo y falsas promesas. Estamos convencidos que el ejercicio de la ciudadanía no empieza ni termina el día de una elección. Entendemos que la solución a nuestros problemas puede llegar como resultado del diálogo entre personas que piensan distinto. Y, fundamentalmente, sostenemos que para cambiar la realidad hay que involucrarse.
En una primera etapa nos propusimos conocer el distrito y a sus principales referentes políticos, económicos y sociales. Compusimos y difundimos en todas las escuelas y bibliotecas una síntesis investigativa con datos y análisis del partido. Y realizamos mensualmente una serie de encuentros en los que panelistas invitados venían a debatir sobre alguna problemática específica, sentando un precedente en la política local.
En esta segunda etapa de trabajo, nos propusimos conocer a las distintas comunidades. Desde el Consejo Escolar, con el trabajo de la consejera María Fernanda Álvarez, estamos colaborando con la comunidad educativa. En los últimos meses estuvimos trabajando con el sector de la tercera edad. Un diálogo constructivo que derivó en la elaboración y presentación de un proyecto de nuestra autoría tendiente a crear el Consejo Municipal de la Tercera Edad.
Y este proyecto se sustenta por el aporte de nuestros jóvenes sanmartinenses. Jóvenes con ideales, con expectativas, con ganas de poner lo mejor de sí.
Esa es la clave para construir ese futuro: no se trata simplemente de un recambio generacional; sino de un enriquecimiento mutuo, chicos y adultos, jóvenes y mayores. Los unos transmiten sus conocimientos y los otros aprenden de ellos, intercambiando ideas y, principalmente, valores.
Desde diversos espacios, los jóvenes políticos soñamos con rescatar la política a través de los valores que nos enseñan quienes nos precedieron en esta gesta. Queremos ser parte de este proceso de desarrollo y consolidación democrática, sumando creatividad y capacidad transformadora a la experiencia de quienes nos preceden en esta tarea de fortalecimiento institucional.
Se habla de la "nueva política", en contraposición a la "vieja política". Para nosotros, hablar de nueva política no es reinventar ningún término ni fijar nuevos paradigmas sino, simplemente, recuperar "la política" en su sentido más clásico y ubicarla en el centro de la escena como lo que siempre fue y deberá ser: la actividad pública más importante que nos ocupa como nación, como provincia y como municipio.
Como jóvenes, debemos asumir el compromiso de conocer nuestro pasado, nuestra historia común, nuestra cultura, nuestros vecinos ilustres, nuestros lugares, nuestras instituciones, para alcanzar ese futuro.
Ese futuro que no es mañana. Que es hoy. Ese futuro que no lo construimos solos. Lo construimos participando e involucrándonos, todos, desde nuestro lugar, desde ahora. Tenemos un grandioso pasado. ¿Cómo no vamos a tener un provechoso futuro? Esa es la invitación que la Juventud Universitaria Independiente tiene para hacerles".
Ese futuro que no es mañana. Que es hoy. Ese futuro que no lo construimos solos. Lo construimos participando e involucrándonos, todos, desde nuestro lugar, desde ahora. Tenemos un grandioso pasado. ¿Cómo no vamos a tener un provechoso futuro? Esa es la invitación que la Juventud Universitaria Independiente tiene para hacerles".
